La galería Lyle O. Reitzel Arte Contemporáneo celebro sus 27 años de existencia, presentando una espectacular exposición individual a cargo del artista español Santiago Ydáñez, titulada “Deep Blue”, a inauguro el Viernes 11 de Noviembre en su sede de la Torre Piantini. Se primera experiencia memorable en Santo Domingo ocurrió con su solo show Fulgor en el 2017.
La obra de Santiago exuda una proeza tecnico-expresiva que combina la soltura del trazo con la efectividad tecnica y comunicativa de su factura. Según el crítico de arte alemán Marius Christian Bomholt:
“Más sustancial es, desde luego, reconocer que Santiago emplea la lógica de la superficie con gran maestría en la muestra que nos ofrece bajo el título de Deep Blue. A primera vista, este espléndido conjunto de retratos monumentales —algunos de ellos del propio artista, otros parte de una selección sugerente de modelos— parece proyectar una profundidad casi mística, configurar la sombra de un misterio, el atisbo de un centro ausente, conocido solamente por esos rostros bellos y silentes, iniciados. Tal impresión se acrecienta cuando reparamos en las expresiones absortas o extasiadas que exhiben muchos de ellos; se intensifica asimismo cuando intentamos adivinar el motivo o la función del color blanco y azul que adorna algunos.
La súbita irrupción del tiburón en medido de estos retratos, sin embargo, nos puede servir como pista de que, antes que de un ritual místico, aquí se trata de un juego alegre, tal vez hasta irónico. Imposible no detectar en él la reminiscencia de uno de los artistas más célebres de la postmodernidad ya ‘clásica’: Damien Hirst, quien saltó a la fama con su tiburón preservado en formol y adornado con un título aparatoso. Pero aparte de esa referencia diáfana, la aparición del animal acuático resulta, en esencia, indescifrable: su relación con las demás piezas es dudosa, su valor semántico difícil de determinar. Y precisamente con ese gesto, la muestra no sólo escenifica la celebración del face value tan propia del arte postmoderno, sino que encuentra un punto de contacto con esa ilegibilidad última del rostro del otro. Del tiburón, plasmado así a secas, entendemos poco. De los rostros, en cambio, creemos entender, aun cuando, en realidad, muchas veces nos damos cuenta de que, cuanto más los contemplamos, menos vemos. La expresión facial, el gesto, el talante nos revelan algo, por supuesto, pero en el fondo, la cara es pura superficie.”
Santiago Ydáñez (Jaén, 1967), graduado en Bellas Artes en la Universidad de Granada, ha realizado talleres entre otros con Juan Genovés y Mitsuo Miura. Ha recibido importantes distinciones y es actualmente uno de los pintores jóvenes españoles con mayor proyección internacional. Obtuvo entre otros el Premio de Pintura BMW en 2018, Premio de Pintura ABC en 2002 y Premio de Pintura Generación 2002 de Caja Madrid, la Beca del Colegio de España en París del Ministerio de Cultura en 2001, la Beca de la Fundación Marcelino Botín en 1998 y la Beca de la Academia de España en Roma. Su obra se encuentra en las colecciones de la Fundación Botín (Santander), Museo Nacional Centro de Arte Reina Sofía (Madrid) entre otros. Actualmente vive y trabaja en Berlín y Jaén. La exposición estará abierta al público hasta el 15 de diciembre del año 2022.